Arte de Pájaros

Pablo Neruda

 

 

Torcaza


En mi infancia las patas rojas
de las torcazas adoré:
los pies de cuero colorado
y aquellos dedos escarlata.
De qué mundo de pluma y sueño
de qué inaccesible vestuario
se desgranó la cetrería
hasta mi pobre condición?
Hacia mi pobre condición
de cazador sin escopeta
perdido en la lluvia y las hojas
del bosque bajaban volando
las innumerables torcazas;
comiendo las negras semillas,
el pan secreto de la selva,
las bayas del áspero estío,
comiendo los granos del cielo,
las direcciones del barranco,
el amanecer cereal,
las golosinas de la aurora.
Y ahora bajaban a mí,
Eran mi familia salvaje,
Venían vestidas de viento
y en cada pluma resplandecían
las rayas ocres de la greda,
los colores de las colinas:
vestían el poncho campestre
de mi bautismo nacional.
Adiós torcazas fragantes
a polvo, a pólvora, a polen:
ya no sé donde se posaron
aquellos pies de cuero rojo:
desaparecieroin las alas,
las muchedumbres del canelo
y ahora por aquellos bosques
se fue del árbol de mi familia:
no me espera nadie volando.
Parece que sólo subsisten
algunos árboles quemados.



volver a Pablo Neruda - Arte de Pájaros

volver a Las aves en la literatura chilena